Durante el segundo año del éxodo de Egipto, Moshé y Aharón recibieron orden de Hashem de contar a todos los israelitas varones cuyas edades oscilaban entre los veinte y los sesenta años…
Esos varones quedaron sujetos a cumplir el servicio militar. El censo reveló que seiscientos tres mil quinientos cincuenta hombres. La tribu de Leví fue excluida del censo general a causa de su misión especial en el Mishkán.
Originalmente, los primogénitos habían sido elegidos por Di-s para cumplir los servicios sagrados. Después de cometido el pecado del becerro de oro, esta codiciada tarea fue asignada a los Leviím, quienes se habían mantenido fieles al Señor en todo momento. En consecuencia, Moshé recibió orden de encomendar a los levitas el servicio del Mishkán bajo la supervisión de Aharón y sus hijos. El censo efectuado reveló que había un total de veintidós mil trescientos Leviím.
Cuando rompían campamento, los tres clanes de Levitas desmantelaban y transportaban el Santuario hasta volverlo a montar al centro del próximo campamento. Y el pueblo armaba sus propias tiendas alrededor de él: los Kehatitas que llevaban sobre sus hombros los accesorios del Santuario (el arca, la menorá, etc) envueltos en diseños especiales para tal función, acampaban al sur; los Gershonitas, encargados de las alfombras, cortinas y tapices del techo, hacia el oeste; y las familias de Merari que transportaban los paneles y pilares, al norte. Antes de la entrada al Santuario, hacia el este, estaban las tiendas de Moshé, Aarón y sus hijos.
Más allá del círculo de los Levitas, las doce tribus acampaban en cuatro grupos de tres tribus cada uno. Al este Judá (pob. 74,600), Isajar (54,400) y Zebulun (57,400); al sur, Reuben (46,500), Simeon (59,300) y Gad (45,650); al oeste, Efraim (40,500), Menasé (32,200) y Benjamín (35,400); y al norte, Dan (62,700), Asher (41,500) y Naftali (53,400). Esta formación también se mantenía durante el viaje. Cada tribu tenía su propio nasi (príncipe o líder), y su propia bandera con su color tribal y emblema.